Un viaje a la opulencia de los indianos asturianos

¿Sabías que en Somao, un pequeño pueblo de Asturias, puedes encontrar más de 20 majestuosos palacios y mansiones? Estas imponentes construcciones fueron erigidas por los emigrantes que hicieron fortuna en Cuba, quienes regresaron a su tierra natal con el deseo de dejar una huella de su éxito. Hoy, Somao se distingue por su impresionante arquitectura y sus infinitos jardines, que se extienden en un mosaico verde lleno de especies exóticas.
El legado de los indianos se observa en cada rincón de Somao, desde las fachadas decoradas con colores vibrantes hasta los jardines llenos de palmeras y secuoyas, recuerdos de las tierras caribeñas. En este pueblo, que forma parte del concejo de Pravia, se puede disfrutar de la mayor concentración de jardines privados en toda Asturias, adornados con fuentes y estatuas que embellecen el paisaje. Un paseo por sus calles parece adentrarse en un «jardín infinito».
La historia detrás de estas mansiones es fascinante. La mayoría de los indianos de Somao emigraron a Cuba, donde amasaron grandes fortunas. Tras su regreso, decidieron invertir su riqueza en la construcción de grandes casas y en la donación de sumas importantes para obras sociales. Gracias a estos esfuerzos, aún hoy se pueden admirar edificaciones como la iglesia de Santa Eulalia de Mérida y las Escuelas Unitarias, que siguen en funcionamiento.
Recorrer Somao es una experiencia única, con mansiones de estilos arquitectónicos diversos que incluyen elementos modernistas, neoclásicos e inspirados en modelos extranjeros. Entre las casas más destacadas se encuentra El Marciel, con su fachada de azulejos rosados, y la Casa de la Torre, famosa por su torreta que recuerda a la Torre Eiffel. Aunque muchas de estas casas son privadas y no se pueden visitar, su esplendor arquitectónico sigue siendo un atractivo turístico. ¿Te gustaría perderte en los jardines de Somao?
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Por María Gutiérrez